En una jaula de cristal

Siempre he querido escribir un diario, pero con un afán voyeurista. A pesar de ser reservada creo que cuando hay un incendio es bueno echarle un gran chorro de agua, por eso escribo esto como letras arrojadas al viento desde una urna transparente.

viernes, 28 de febrero de 2014

Ahora he decidido ser...

...la mujer flor de Picasso y sonreír. Son muchas cosas malas las que me han estado pasando: salud, amor, dinero (todo en orden de importancia). Pero voy a sonreír, voy a cambiarle la cara a las cosas, porque ya no puedo más, la rutina me a tragar y luego me va escupir y todo va a seguir estando mal.
Pienso que todas las cosas se arreglarán y veo desde mi cama como la via pasa y yo no estoy allí. Es una cosa rara. Espero que todo se arregle por la fuerza interna del mundo sin que yo tenga que mover un dedo. No es que no haga nada por flojera, es que simplemente no sé que hacer. En este momento no sé qué podría hacer. No hay forma de solucionar los problemas de dinero y amor; amor y dinero van mal, van mediocremente en picada. No sé... No sé qué hacer... Y espero que la próxima vez que escriba ya tenga una o varias respuestas.